La diabetes es una condición que afecta todo el cuerpo y se debe a la falta de la hormona insulina. Es como una llave que permite la entrada de azúcar a las células y la utiliza para realizar todas sus funciones.
Existen varios tipos de diabetes: la diabetes tipo I, II y otras. La tipo I es la llamada diabetes juvenil, que afecta principalmente a niños y adultos jóvenes y sus cuerpos no producen insulina o lo hacen en cantidades insuficientes, por lo que tienen que inyectarse insulina. Y la diabetes tipo II ocurre mayormente en adultos y son personas que tienen resistencia a la insulina, por lo que sus cuerpos no pueden utilizarla de manera adecuada, se acumulan altos niveles de azúcar en la sangre.
En los pacientes con diabetes el riesgo de contraer enfermedades bucales es mayor porque son más susceptibles a las infecciones y si aunado a esto hay un pobre control de la glucosa éstas se agudizan más.
Los signos y síntomas más comunes en la boca de los pacientes con diabetes son:
- Sensación de ardor.
- Boca seca.
- Infecciones bacterianas.
- Abscesos múltiples.
- Periodontitis o Piorrea
Las enfermedades periodontales son infecciones bacterianas que afectan las encías que rodean al diente y el hueso que los soporta. La principal causa de estas enfermedades es la placa bacteriana, la cual es una película o capa pegajosa que como su nombre lo indica esta formada por bacterias y se forma constantemente sobre la superficie del diente, esto puede provocar que las encías se inflamen y se tornen rojas y sangrantes. Por lo tanto es fundamental el cepillado diario y el uso del hilo dental para evitar la acumulación de placa. Esa placa se va acumulando y si no se remueve se convierte en una sustancia dura llamada cálculo. Si el cálculo se extiende debajo de las encías hace que la limpieza sea mas dificil y conlleva a la pérdida del hueso que soporta el diente y por eso el diente se mueve y debe ser extraído.
Las enfermedades periodontales pueden ser más severas en diabéticos que no controlen sus niveles de glicemia y además las enfermedades perdiodontales no tratadas pueden hacer que los pacientes diabéticos tengan dificultades para controlar su diabetes.
Para controlar o prevenir este tipo de infecciones en la cavidad bucal que en un principio se presenta sin síntomas debemos:
- Mantener un buen control de la diabetes.
- Controlar la placa dentobacteriana, esto se logra con una correcta técnica de cepillado, uso de hilo dental.
- Tener un buen control del azúcar en sangre.
- Visitar al dentista periódicamente
Y en caso de tener algunos de estos signos de enfermedad periodontal acudir inmediatamente al especialista que es el Periodoncista para realizar el correcto tratamiento.